¿De dónde venimos y adónde vamos?
Quien dice o escribe esta frase normalmente tiene dos dudas, una metafísica, en la que poco podemos ayudar, y otra ortográfica, que sí nos incumbe. La ortográfica es si ese adónde está bien escrito o debe aparecer como dos palabras: a dónde.
Pues la solución es muy sencilla: puede escribirse como se quiera.
- ¿Nos puedes decir a dónde/adónde vamos? Llevamos media hora caminando a lo tonto.
Lo mismo sucede cuando el adverbio no es interrogativo. En este caso no lleva tilde:
- Vamos a donde/adonde nos lleve nuestro destino.